
TXAPELPUNK
Cuando hablamos de Txapenpunk es como si dijéramos Iñiguito Txapel. Txapenpunk es el nombre del grupo e Iñiguito Txapel es su creador, mentor y responsable. La afición por la música le viene desde su adolescencia; a los quince tocaba en el grupo Askatu y poco tiempo más tarde se incorporó a las filas de Etsaiak para grabar en 1988 la primera maqueta a la cual seguiría una serie de siete discos. Los últimos años ha estado compaginándolos entre Etsaiak y Txapelpunk. El primer concierto de Txapelpunk fue en la discoteca Kababua en su natal Lekeitio a finales de 1999, pero el afianzamiento de ese proyecto se forjó en el 2000 editando su primer disco, el cual fue recibido con grandes agasajos.
Su nombre es Txapelpunk y es punk lo que hace, pero rebasa esos límites con soltura. Aunque para una rápida acomodación definitoria es suficiente. Encontraremos las características inevitables del punk, ya que en él las canciones tienen como fundamento la comunicación, el feed back. Buscar la facilidad de las canciones y relegar todo atisbo sobrante. A Txapelpunk la vida se le va (pero es que así la vive) en la búsqueda de canciones. Siempre pendiente de ese ritmo que fulmine al oyente. El rock, la agilidad de las canciones, la capacidad de cantar y la habilidad para crear estribillos es el punto secreto de Txapelpunk. Esto no significa que dulcifique el punk, pero al público le llegan los temas con grato sabor.
Los textos tienen la profundidad del poeta callejero. Escribe sobre lo que tiene delante de sus ojos. Sus letras son fotos diáfanas de la realidad, siempre con la mirada pendiente como si fuera lápiz que la está describiendo. Lápiz de acerada punta unida a afilada música. Calidad y poder seductivo-comunicativo espontáneo e instintivo.
Taldekideak:
Iñigito: Ahotsa
Atrofi: Baxua
Toki: Bateria
Nani: Gitarra
Txapelpunk - Txapelpunk (2000)









